NEW JERSEY. -A DC United se le está haciendo una costumbre perder todo lo que pone en juego. Es la constante en cada presentación suya. Los capitalinos jugaron un encuentro con suplentes y abotonados hasta el cuello de ilusión en su objetivo de robar al menos un punto en su visita al techo del MSU Soccer Park, pero no pudo ser, pues el sorprendente Red Bull New York ratificó su condición de imbatible y lo derrotó 1 a 0 por la ronda 32 de la US Open Cup entre la MLS y los campeones de la USL.
La casa supo mantener su aplicada estrategia defensiva a lo largo de todo el primer tiempo. El estratega Troy Lesesneplanteó un sistema cauteloso, con tres hombres atrás Andrés Reyes, Hassan Ndam y John Tolkin y con cuatro que permanentemente apoyaban Cameron Haper, Daniel Edelman, Cristian Casseres Jr. y Peter Stroud apoyando a Fernández dejando toda la responsabilidad de rotar el balón de un costado a otro con la finalidad de matar tiempo; adelante Tom Barlow y Dru Yearwood como atacantes en punta intentando molestar a una defensa que no tuvo nunca mucho trabajo.
Es cierto que Red Bull no convirtió en los primeros minutos, pero en esos 20 minutos radicaron su triunfo, pues de tanto gestar jugadas de peligro para el pórtico de Bono, terminaron por agotar todas las defensas del elenco capitalino; además de la inteligente actitud del técnico Lesesne en jugarle las espaldas a Yamil Asad y Chris Durkin y encimar las salidas de Kristian Fletcher y Erik Hurtado.
El gol de la casa era un canto anunciado. A los 28 minutos una mano dentro del área Fernández quien no pudo despejar el peligro tras el violento disparo no sólo venció al golero Bono, sino también rompió los sueños locales.
Con el resultado en contra, al DC United no le quedó otra opción que salir a buscar el partido. Ingresaron Ruan y Donovan Pines con la finalidad de refrescar el ataque capitalino, sin embargo, fue muy poco lo que ambos jugadores pudieron hacer sobre el terreno de juego, pues el comportamiento de la última línea local fue admirable.
Sin embargo, Hayden Sargis y Matai Akinmboni cayeron en la desesperación y se hicieron acreedores a la cartulina amarilla tras agredir también.
Pero DC United nada pudo hacer. Sólo tuvo una ocasión de anotar. Fue el argentino Asad. Estuvo solo y mandó la pelota afuera.
Red Bull New York ganó y sigue arriba. Su momento no es un espejismo. Los neoyorquinos no se caen y fecha a fecha ratifican que son protagonistas.
