HARRISON, NJ -Un empate siempre hace bien. Sobre todo, cuando ya se había convertido en una especie de quimera para New York Red Bulls, que necesitaba sí o sí una victoria o un empate como la conseguida ante uno de los lideres de la Conferencia del Oeste el Vancouver Whitecaps FC.
Un 1-1 le costó mucho al equipo rojo por cuanto se enfrentó a una escuadra como la canadiense que necesitaba hacerse de los tres puntos para recuperar protagonismo en su Conferencia y la Liga MLS.
Esto aunado a los hombres que pisaron el Red Bull Arena; la mayoría de ellos con un buen pergamino en lo que a historial deportivo se refiere, lo que hacía prever que el New York Red Bulls-Vancouver Whitecaps FC prometía un gran partido.
No se equivocaron porque frente a frente se encontraron dos oncenas que lo querían todo. Adueñarse del balón, imponer su juego y ganar.
Con fuerza, pero sin mala intención, lo cual facilitó la labor del réferi Mark Allatin, neoyorquinos y canadienses tuvieron como consigna llegar con peligro a los arcos, la única excepción fue la expulsión del zaguero Noah Eile a los 74 minutos dejando a su equipo con 10 hombres.
Incluso, se puede decir que eran los de Vancouver Whitecaps FC los que mejor hacían las cosas, teniendo en Brian Whitea un verdadero dolor de cabeza. Entre él y el inglés Sam Adekugbe, y por momentos el escoces Ryan Gauld, hicieron trabajar más de la cuenta a una dura, pero hasta ese momento segura defensa roja con los hermanos Dylan & Sean Nealis, Noah Eile expulsado y John Tolkin.
Y cuando parecía que eran los locales quienes podían inaugurar la cuenta, vino lo impensado, una jugada por derecha de Ryan Raposo que entró al área, combino con Pedro Vite este habilito a Brian White y solo frente al arco toco el balón para introducirlo por debajo de las piernas del meta paraguayo Carlos Coronel para el 1 a 0 a los 15 minutos.
Después del gol en contra allí nomás vino una acción en la valla canadiense. José Carmona se interna por derecha, pero su remate es bloqueado por el meta Yohei Takaoka ahogando el grito de gol a los 37 minutos.
Pero como existe también la justicia en este deporte de masas, llego a los 56 minutos del complemento tras un córner por la banda derecha ejecutado por Emil Forsberg, quien envió el balón al corazón del área chica, el esférico pisó el área, pero para su mala fortuna del meta Yohei Takaoka el esférico quedó picando y lo cogió Lewis Morgan, que seguía la jugada. El escoces no perdonó y puso las cifras a 1-1 y se hacía justicia.
Lógicamente que, con el empate los locales salieron en pos del triunfo, con elementos de refresco como Elias Manoel, Frankie Amaya y Cameron Harper y el café cargado de su técnico Sandro Schwarz.
Pero los locales con las justas lograron entrar al área visitante y cuando lo conseguían allí estaba la mano bendita de Yohei Takaoka o la pierna salvadora del recién ingresado Fafa Picault u el serbio Ranko Veselinovic.
Hasta el último pugnaron por liquidar la contienda, pero la suerte estaba echada y New York Red Bulls no logro romper la racha de los tres empates consecutivos sin poder salir con los brazos en alto. Ya le tocara esa alegria. Ojalá y sea el comienzo de algo hermoso, pues los del New York Red Bulls por historia en la MLS se lo merecen…