WASHINGTON, DC –El equipo de Orlando Pride sigue. Volteó al Washington Spirit, conserva la tercera posición en la tabla general, y confirma su autoridad sobre el cuadro capitalino afianzándose para los playoffs en la NWSL.
Pero no sólo gana. También crece en recursos, en concepto colectivo y en juego. Vamos a ser sinceros: el prejuicio siempre estuvo instalado. Con o sin razón. Pero ahí. En la piel de la hinchada capitalina que abarroto el Audi Field de la capital. Como una mancha. Como una afrenta. Como una lacerante puñalada.

El folklore futbolero suele resumirse en algunas palabras reveladoras: “A la hinchada de la capital le interesa ganar como sea, pero no perder en casa”. La calificación, obviamente, acreditaba una dosis considerable de desprecio. Quizás también de burla e ironía. En definitiva, un estigma difícil de quebrar que recorrió el espinel de la historia, sostenido en algunas verdades puntuales y en una larga variedad de mentiras.
Pero como reza la mítica canción de Héctor Lavoe —“Todo tiene su final, nada dura para siempre”— este Orlando Pride del estratega Seb Hines, más allá de borrar de la cancha al Washington Spirit con un 3-2 rotundo, y llegar a los playoffs con partidos invictos y de estar en las puertas de lograr una hazaña con una autoridad que impacta, provocó en el umbral de la capital una movida esencial: juega el fútbol que le gusta a su gente.
Pero no sólo a la gente de Orlando Pride: sino también al extrapartidario, al imparcial, al que goza y sufre por otros colores, por otra camiseta la del Washington Spirit.

Durante los primeros minutos las locales fueron claras dominadoras del partido con un medio sector adueñándose del balón por intermedio de Heather Stainbrook quien alimentaba a sus delanteras Croix Bethune, Brittany Ratcliffe y la italiana Sofia Cantore quienes llegaban a inquietar la valla custodiada por la meta Anna Moorhouse.
Es así que cuando transcurrían los 35 minutos un tiro libre por la banda derecha de Kate Wiesner envía un centro, pero la zaguera visitante Kerry Abello en su intento de despejar el peligro dentro del área chica, desvía el balón descolocando a su guardameta Anna Moorhouse para el 1-0 a favor de la casa.
Luego del gol en contra el cuadro visitante, la mexicana Jacquie Ovalle ejecuta un tiro libre enviando un centro para la mediocampista Haley McCutcheon recibe el balón para habilitar a la zaguera Karry Abello quien se sumó al ataque, sola y sin marca envía un potente remate para enviar el esférico al fondo de las redes de la guardameta Aubrey Kingsburry para igualar el marcador 1-1 a favor de la visita.

Poco después responde la casa con Paige Metayer quien envía un pase certero desde banda derecha para la italiana Sofia Cantore quien solo y de espaldas al arco de ‘taquito’ deja sin acción a la guardameta Anna Moorhouse para el 2-1 a favor del cuadro capitalino ante la euforia total a los 42 minutos.
Para la segunda mitad el cuadro visitante sale más incisivo por la pésima respuesta del cuadro capitalino en una jugada a los 46 minutos Marta Vieira Da Silva se quita 2 defensas centrando un pase, pero en su afan de desviar el peligro la capitalina Narumi Miura envía el esférico al fondo de su portería para el 2-2 transitorio.

Pero la casa se repliega a la vez hacen tiempo, pero en una jugada polémica a los 72 minutos la visita aprovecha un centro desde la izquierda para Ally Watt esta ingresa al área pero es derribada por la zaguera Kysha Sylla, el juez central marca la pena máxima, la falta la ejecuta por Marta Vieira Da Silva quien remata a la derecha de la meta capitalina para el 3-2 que a la postre seria, el definitivo.

Con los tres goles en contra Washington Spirit intenta despertar de su letargo y comenzaron a atacar el arco visitante con remates de larga distancia, pero las buenas atajadas del Anna Moorhouse impedían la igualdad de la casa.
La derrota de las dirigidas por el estratega español Adrián González no convence, de cara a los playoffs a pesar de la derrota les permite seguir en carrera, pero alimentar la ilusión a sus hinchas muy poco, pero soñar no cuesta nada, pero vivirlo es su realidad

Pero Orlando Pride gana y convence. Gana y estimula. Gana y sigue apurando su crecimiento. Porque deja algo. Porque no se conforma. Y por supuesto, porque trasciende la chapa del resultado. Ese es el mérito superior del equipo visitante y que instala un mensaje para los playoffs…