WASHINGTON, DC –Si tuviéramos que extendernos en el diagnóstico futbolístico, definitivamente diríamos que no se vio un buen partido. Porque Washington Spirit equivocó el libreto en el complemento.
El estratega español Adrián González dejó en el banco a la italiana Sofia Cantore y la mexicana Rebeca Bernal, pensó que jugando con tres delanteras –Trinity Rodman, Rose Kouassi y Gift Monday– conseguiría mayor fuerza ofensiva. Sin embargo, la cuota de creatividad en el medio sector quedó huérfana, porque sencillamente la colombiana Leicy Santos –a pesar que tiene aptitudes para ello– sé recostó en demasía por la izquierda y todos sabemos también que Croix Bethune resulta un buen complemento para la hora del ataque, pero no se le puede dar la responsabilidad de llevar los hilos ofensivos del equipo.

Es por ello que Rose Kouassi intentó echarse el cuadro al hombro, pero cada vez que tenía la pelota le caían hasta tres jugadoras y sus posibilidades de llegar con mayor peligro sobre el pórtico de Kailen Sheridan se hacían prácticamente nulas, porque no encontraba los espacios para hacer su fútbol.
Por otro lado, la artillera Adriana León del San Diego Wave FC desarrollaba un trabajo importante, porque a pesar que no recibía balones, se las ingeniaba basándose en movilidad y rapidez para abrir a la defensa local. Sin embargo, no había el nexo de volante–delantera, y así resultaba definitivamente imposible romper el empate.
Por su parte, Washington Spirit mostró un sistema rígido, disciplinado y funcional. Con una línea de cuatro zagueras al fondo, con tres volantes combativas y dejando arriba la posibilidad de gol en Trinity Rodman, Gift Monday y Rose Kouassi y justamente esta jugadora fabricó su doblete personal, cuando se enfrentó a Kailen Sheridan.

El San Diego Wave FC reemplazaba el fútbol por prepotencia, pues no encontraba mayores variantes en su vertiginosa sucesión de errores.
Hasta que, a los 9 minutos, tras una jugada previa de la zaguera Deb Abiodun, tomó la pelota por el sector derecho y lanzó un fuerte pase al segundo palo de Kailen Sheridan y la bola encontró a Rose Kouassi para conectar un cabezazo que infló desahogadamente las redes de la visita para el 1-0 transitario y la euforia de los 17,422 espectadores que abarrotaron el Audi Field de la capital.
Sin embargo, llegó el empate a los 95 minutos del tiempo agregado a favor de la visita. Kyra Carusa ganó una posición ante la lentitud de la defensa capitalina y habilito a Delphine Cascarino. Esta llegó hasta las mismas líneas defensivas de Aubrey Kingsbury para que con un remate bajo decretara el empate ante la sorpresa de la hinchada capitalina.

Pero dicen que no está muerta quien todavía lucha hasta el final. A los 98 minutos del epilogo y con la italiana Sofia Cantore en la cancha y cuando el drama jugueteaba a su antojo con las ilusiones capitalinas habilito a Rose Kouassiquien forzó una pelota ante un enjambre de zagueras visitantes, llegó a sacar un remate desde fuera del área para el 2-1 definitivo y la euforia total de toda la hinchada que celebro la victoria.
Un triunfo que le permite al Washington Spirit sumar tres puntos más, aunque en materia de fútbol siga restando ya que se mantiene en la segunda posición con 43 unidades debajo de la super líder Kansas City Current.

Washington Spirit le arruinó la continuidad de sus alegrías en los planes del San Diego Wave. Y, sobre todo, ilusionó a toda la capital…