HARRISON, NJ –Como negocio, para New York Red Bulls estuvo bien. Porque apenas tuvo unos minutos de inspiración, en que de verdad jugó fútbol y selló el empate. Pero, como siempre, dejó la incógnita del por qué no puede mantener esa fisonomía por más tiempo y acaba con la angustia de poder perder el partido.
Aun así, Red Bulls empató con Sporting Kansas City 1-1 en el Red Bull Arena y se afianzó en la cuarta casilla del torneo MLS. Tiene 43 unidades y eso le permite ingresar al indescifrable mundo de los sueños de la clasificación a los Playoffs.
Pero, para soñar -lo debe saber Vedad Ibisevic y sus pupilos- es mejor jugar bien al fútbol por más tiempo. Esta vez demostró que puede hacerlo. Y ahora la palabra la tienen ellos.
¿Red Bulls? Tuvo más tiempo la pelota. Pero ya no tiene la velocidad de antes y entonces debió conformarse con el empate.
Red Bulls supo en todo momento que sólo le interesaba el triunfo. Tal vez por eso tuvo un comienzo fulminante. A pura velocidad. A puro toque. Casi un monopolio rojo del balón que terminó en grito de gol a los 89 minutos del final angustiosamente.
Es que Sporting Kansas City sólo veía pasar la pelota. Pero cuando transcurrían los 55 minutos Jake Davis se la dio al mexicano Alan Pulido, este baja el balón con la cabeza y sólo la tocó para el 1-0. Sporting Kansas City ganaba en el Red Bull Arena.
¿Presagio de goleada? Los que pensaron eso casi lo ratificaron en los minutos finales. Casi, porque Sporting Kansas City tuvo ocasiones, pero ya no tuvo gol. Vedad Ibisevic se dio cuenta. Red Bulls requería fútbol e ideas. Y decidió hacer cambios. Sacó a Peter Stroud e ingresó el noruego Dennis Gjengaar y el belga Dante Vanzeir por Cory Burke y se arriesgó adelante con el juvenil Julián Hall por Elías Manoel.
Sporting Kansas City ya había bajado las revoluciones. Erik Thommy se dedicó apenas a rotar el balón, junto a Daniel Salloi y Zorhan Bassong. Los celestes cometieron el error de conformarse con el 1-0.
En cambio, con Dante Vanzeir, Red Bulls mejoró. El belga tiene oficio y ordenó las ideas ofensivas del equipo de Vedad Ibisevic.
Eso se comprobó a los 89 minutos. El juvenil de 16 años Julián Hall ganó un balón dentro del área cuando el zaguero Robert Castellanos en su intento de despejar la pelota este habilitó a Julian Hall y el juvenil no perdonó. Remato cruzado para derrotar al meta Tim Meliá. Gol. Empate y a comenzar de nuevo.
Red Bulls tomó confianza y tuvo un par de ocasiones más, generadas por Sean Nealis. Ahora el cuadro rojo dejó a su hinchada ilusionada.
Pero los dos, Red Bulls y Sporting Kansas City, empezaron los minutos finales con la decisión de lograr otro gol.
Y al final, para New York Red Bulls, fue negocio. Está cuarto y sueña. ¿Puede jugar bien por más tiempo? pero sus muchachos tienen la palabra…
